Fechas hay que
no se olvidan
aunque pasen muchos años,
porque siempre nos validan
júbilos o desengaños.
Yo recuerdo bien las fechas
de los partos de mis hijas
y también las de cosechas
tras jornadas muy prolijas.
Además retengo aquellas
de grandiosas ocasiones,
cuando fúlgidas estrellas
compensaban mis tesones.
La viví también funestas
igualmente numerosas,
pero no hablaré de éstas
por lo trágicas y umbrosas.
Pero quiero mencionar
una fecha solamente,
esa en que la vi pasar
y se me alojó en la mente.
No podría hablar si fue
de feliz o atroz recuerdo
porque desde entonces sé
que es mi mundo poco cuerdo
Quiero confesar apenas
que después de verla un día
supe de profundas penas,
que antes yo jamás sentía.
Que mi proceder cambió
- de seguro para mal -
y el vivir se convirtió
en un vértigo infernal.
Y que clamo sin salida
por su boca prohibida...
Poema en cuartetos octosílabos,
(salvo el final). Acentuación en 1ª y/o
3ª y/o 5ª y 7ª.
Rima alternada consonante ABAB…
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