viernes, 7 de octubre de 2011

PARA SIEMPRE

Apático, trashumante,
a la deriva en la vida,
transitaba dando tumbos
sin brújula ni horizonte.

Pero un faro luminoso
apareció de repente
señalándome un sendero
que conducía al edén.

Vi tu rostro, tu mirada,
tu sonrisa, tu palabra;
y unos espléndidos brazos  
en los cuales reposar.

Me acogiste sin reserva
y vendaste mis heridas,
me cubriste con tus besos
y regalaste tu amor.

Si lo que vivo es un sueño
no permitas que despierte,
eterniza mi utopía
a tu lado para siempre.

Poema  poli rítmico en cuartetos octosílabos.
Versos blancos.

1 comentario:

  1. Bonito poema de amor apreciando la luz de un rostro, una mirada, un sueño...

    Besos.

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