Afirmo
que la vieja me ha humillado,
no
podría explicarlo diferente,
como
hablar en lenguaje más prudente,
si con
un vibrador me ha suplantado.
.
Cómo
viene a decirme sin clemencia
que varió
nuestro sexo en adelante,
porque
le han obsequiado un “ayudante”
que
atiende con honores cada urgencia.
.
Ahora
se le ha dado por decirme,
- con ímpetu de chica liberada -
que al
lado de su “bicho” no soy nada,
que
incluso si deseo puedo irme.
.
Justifica
su nueva posición
diciendo
que ese falo es formidable,
de
ritmo sostenido, incomparable;
y
dispuesto por horas a la acción.
.
Que con
él no recibe la disculpa
para
explicar porqué de las blanduras
ni ve
eyaculaciones prematuras
ni
justificaciones por la culpa.
.
Que su
juguete siempre está dispuesto
y le
puede accionar a sus deseos
que además
no requiere chupeteos
y permanece
siempre bien enhiesto.
.
Con
todas las ventajas de esa “bestia”
admito
que es difícil competir
creo
que en adelante iré a dormir
donde
no les provoque una molestia.
.
Es hora
de buscarme en otro lado
quien
comparta conmigo como amiga,
no
aspire que mi miembro sea viga
ni tampoco
de plástico inyectado.
.
Si de
pronto no encuentro tal pareja
entonces
optaré por la muñeca
una
inflable que venden: sin jaqueca,
sorda,
muda, sumisa y… nunca vieja.
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