TODAVÍA

No entiendo que sucede al recordarte

que lo hago y se aceleran mis latidos

se tornan emotivos mis sentidos

y siento que algo adentro se me parte.

Será mi penitencia por amarte

por todos los intentos no cumplidos,

los múltiples propósitos perdidos

y todo cuanto en vano quise darte.

Será que sobrevive aquel embrujo

que puso mi existencia entre tus manos

y a tantas desventuras me condujo.

O apenas son residuos nada sanos

de aquella pantomima que produjo  

mi ilusa convicción en sueños vanos.  

Pasaron tantos años… ¡Quién diría,

me hostigue tu recuerdo todavía

y siga provocándome agonía!